IMAGEN DE UN CERRO DE VALPARAÍSO |
La Cátedra Libre Salvador Allende lamenta la
partida de Humberto Giannini y destaca su dedicación a la formación de
estudiantes y su incansable lucha por la educación pública de Chile.
Nació en 1927, en San
Bernardo, pero creció en Valparaíso, ciudad que siempre añoró. “Emigré a los 20
años de Valparaíso, y traigo la sensación de libertad al caminar, al bajar los
cerros, al subirlos a pie, al andar por la calle, saludarme con la gente. Todo
eso hace un mundo. Valparaíso es una ciudad que invita a recordarla, no puedo
olvidarla”, dijo recientemente en una entrevista publicada por la Vicerrectoría
de Extensión y Comunicaciones de la Universidad de Chile.
Quien es considerado como uno de los
filósofos más influyentes de Chile, vio marcada su formación secundaria en
Playa Ancha y sus problemas de disciplina. Siendo todavía adolescente ingresó a
la Marina, donde permaneció dos años y tras finalizar sus estudios en un liceo
nocturno, decidió trasladarse a Santiago para estudiar Pedagogía en Filosofía
en la Universidad de Chile. Egresó en 1960 con el título de Profesor de Estado
en Filosofía, no obstante, su carrera docente en esta casa de estudios comenzó
en 1958, ocupando el cargo de Ayudante en el Curso de Introducción a la
Filosofía. A partir de entonces dictó numerosos cursos regulares y seminarios
en pregrado, magistratura y doctorado en universidades nacionales y
extranjeras.
Filósofo
de lo cotidiano
A su formación de pregrado el Profesor
Giannini sumó estudios de Hermenéutica y Filosofía de la Religión, en la
Universidad de Roma, donde preparó su tesis de grado en el tema de Metafísica
del Lenguaje.
Entre las muchas distinciones que recibió
durante su vida se encuentran el Premio Nacional de Humanidades y Ciencias
Sociales 1999, Doctor Honoris Causa de la Universidad de París, Director de la
Cátedra Unesco en nuestro país, miembro de número de la Academia Chilena de la
Lengua, Profesor Emérito de la Universidad de Chile en 2012, y Premio Altazor
de Ensayo 2009 por su obra “La metafísica eres tú”.
Su carrera académica fue prolífica en cuanto
a publicaciones, entre sus obras se incluyen Reflexiones acerca de la
convivencia humana (1965), Desde las palabras (1981), Del bien que se espera y
del bien que se debe (1997), y Breve Historia de la Filosofía, (1985), entre
otras.
El Profesor Giannini se especializó en la
fenomenología de la cotidianeidad e hizo suyos conceptos como la tolerancia, la
convivencia comunicativa, la reflexión diaria, la condición humana de pasante,
las rutinas, los periplos, las pausas y las conversaciones.
Educación
pública y política
En 2013 el Profesor Giannini fue convocado
por las máximas autoridades de la U. de Chile para participar del acto en
conmemoración de los 40 años del Golpe Militar.
“Pedir perdón implica abandonar
justificaciones, implica autoconfesión (…) Por el momento sólo tenemos el
‘nunca más’ que toca muy fuertemente a la Universidad de Chile, pero falta el
perdón”, argumentó el Premio Nacional de Humanidades y Cs. Sociales en su
intervención, marcada por el relato de aquel 11 de septiembre que él vivió como
académico en el Pedagógico de la Universidad.
En la última entrevista publicada del
Profesor Giannini en la Revista El Paracaídas de la Universidad de Chile,
recordó sobre esa época, “yo no tenía una determinada posición política; clara,
digamos. Pero sí todos mis amigos eran de izquierda, muchos de ellos tuvieron
que irse de Chile o murieron en el camino. Pero yo antes de la Junta no tenía
una posición política, lo que quería era estudiar filosofía. La filosofía tiene
muchos rumbos, y el mío no era la política. Era la reflexión, no la acción,
todavía”.
La Dictadura no solo transformó a la U. de
Chile, también al filósofo, quien en la misma entrevista describe que el Golpe
lo cambió radicalmente y lo llevó tomar una posición muy clara: “Anti
gobiernista, anti dictadura”.
Junto a la democracia, la educación pública
fue otro de los grandes temas que lo movilizaron durante su vida. “La gratuidad
es un derecho de nacimiento. Nadie nos llamó a existir en la vida, llegamos
simplemente todas y todos. Y los pobres y los ricos llegan a la vida igual,
pero llegar a la vida significa una obligación de la sociedad”, aseguró en
entrevista con El Paracaídas el filósofo, que tras 60 años de labor educativa
en esta casa de estudios dijo, “la Universidad de Chile es mi segunda casa”.
(gentileza del CIUDADANO)
catedralibreallende@gmail.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario