Me siento feliz, y recuerdo cuando se cumplían dos años del golpe de Estado, yo tenía 12, como familia vivíamos la mayor de las pobrezas, mi padre la persecución, yo lloraba y mi madre me decía que la historia iba a cambiar, sería que aún retenía en sus oídos las últimas palabras de Allende, 'Y les digo, que tengo la certeza de que la semilla que hemos entregado a la conciencia digna de miles y miles de chilenos, no podrá ser cegada definitivamente. Tienen la fuerza podrán avasallarnos, pero no se detienen los procesos sociales ni con el crimen ni con la fuerza. La historia es nuestra y la hacen los pueblos'. MYRIAM
jueves, 18 de septiembre de 2008
Triunfo de la memoria: El Presidente Salvador Allende, considerado el más grande de la historia de Chile, como resultado de la votación del público
Quiero compartir mi alegría por el triunfo de nuestro Compañero Presidente, Salvador Allende, considerado el más grande de la historia de Chile, en el programa de Televisión Nacional 'grandes Chilenos de nuestra historia'. Si bien sabíamos muchos, que este programa estaba acorde con las necesidades políticas actuales del bloque en el poder (Concertación y derecha económica) ya que el equipo asesor de estos programas estuvo conformado exclusivamente por historiadores de centro y de derecha de la Pontificia Universidad Católica de Chile, y que el programa consagrado a Allende fue revisado tres veces por Daniel Fernández, director ejecutivo del Canal estatal, ´que consideraba el final muy 'utópico', sugiriendo un cambio para contemplar otra visión de la crisis institucional de 1973; este triunfo podría decirse que es el triunfo de la MEMORIA, de los que no dejamos de reivindicar su nombre y el gobierno de la UNIDAD POPULAR, demuestran el desfase de la 'historia oficial' y la memoria popular, ya de por si los 10 escogidos es un reconocimiento a personajes que con sus diferencias tienen un común denominador: todos personajes caracterizados por la firmeza de sus convicciones, su honestidad, el heroísmo o la sensibilidad artística y en muchos casos un final tan digno como trágico.
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